XXY

Me gustó mucho XXY. Me gustó el color azul y gris que la envuelve. La libertad de esta chica que corre por la playa y por el bosque, la fascinación que genera en su forma de relacionarse, su capacidad para hacerse querer incluso en un rincón tan aislado, y ahí están su amiga, su amigo y su nuevo amigo, todos con ella para llorar su dolor. Me gustó este padre tan sufridor y tan valiente como para pelearse con el mundo con tal de que su hija pueda elegir qué ser. Y me encantó Inés Efrón, tan pura, con esos ojos tan azules, ese cuerpo delgado, esa desgarradora sinceridad, esa inmensa ternura andrógina. Me impactaron la dulzura y la sabiduría de las voces de la protagonista y la directora en la conversación que siguió a la emisión de la película. Me ronda en la cabeza desde entonces.