lunes, 7 de junio de 2010

Los ojos amarillos de los cocodrilos

Katherine Pancol, La Esfera de los Libros, 2010.

En este libro hay dos bandos: el de la protagonista, Josephine, es el lado de los buenos. En ese bando están su amiga Shirley, su cuñado Philippe, el hombre del que se enamora en la biblioteca y su padrastro. En el otro bando, el de los malos, cuya líder indiscutible es su madre, están su hermana Iris, su exmarido Antoine, su vecina Barthillet, las amigas de su hermana... Hay otros personajes que no acaban de encajar en uno de los bandos, pero generalmente es por la poca atención que les dedica el narrador.

En este libro hay una mujer cuarentona que sufre mucho: su marido en paro la abandona por la peluquera del barrio, está gorda y flácida, carece de autoestima, su hija se avergüenza de ella, su familia la critica continuamente y vive inmersa en el siglo XII, del que es especialista. Así las cosas, gracias al apoyo incondicional de su amiga y a las muchas virtudes que posee (una gran inteligencia, toneladas de amor para repartir, inocencia y capacidad de perdón, talento y humildad, etc) no sólo saldrá adelante y ganará mucho dinero, sino que conseguirá el amor de los hombres que la rodean y la admiración (o la envidia, según se mire) de las mujeres. Es, por tanto, un libro de evolución, donde Josephine se construye a sí misma y acaba consiguiendo un contexto feliz. Fantástico.

Es tópico, indudablemente. Es ideal para aquellas que quieren creer que la triste puede ganar y que la guapa puede perder. Pero deben quererlo con todas sus fuerzas, pues serán puestas a prueba: como cuando el exmarido fugado monta un criadero de cocodrilos en África, o cuando la amiga misteriosa da una paliza a unos ladronzuelos (porque es guardaespaldas de la familia real, de la que es una hija bastarda), o cuando un modelazo de pasarela la invita a salir, o cuando su cuñado se enamora de ella y le promete amor eterno, o cuando su hija adolescente, que la critica continuamente, va a la tele para defenderla... La verdad es que hay muchas muchas pruebas...

Fácil de leer, con interesantes alusiones a la cultura francesa, para mí la parte más dura ha sido la sinopsis de la novela histórica que Josephine escribe para que su hermana pueda firmarla y presentarla al mundo ("Una reina tan humilde"... un auténtico horror!!). Lo mejor es que no se me ocurre a nadie a quien recomendarla, y esa es una gran noticia.

No hay comentarios:

Datos personales

Hace ya tiempo que miria quiso creer. Percibo cambios en el horizonte y hay que afrontarlos. Seguiré hablando sola, pero en voz un poco más alta, por si alguien quiere replicar.

Etiquetas